La leyenda de (?)

Drag'a gaar miró los anuncios del tablón y no le interesó especialmente ninguno, asi que preguntó por la manera más rápida de llegar al bosque:
- Disculpe, ¿podría decirme hacia donde queda el bosque?
De esta forma, se prepararía físicamente haciendo ejercicio con los animales salvajes o lo que fuese que hubiera en el bosque.
- ¿El bosque de Iltur? - le contestó el hombre - está al este de aquí, saliendo del pueblo.
- Muchas gracias - respondió el saurio, volviéndose a tapar con la capucha y marchándose velozmente.

Caminando en busca de Wind, Mila se encontraba perdida entre tanta gente. Muchas de esas personas venían de las afueras, tenían la intención de entrenar sus capacidades físicas y mentales y de conseguir un poco de dinero. El día del torneo se acercaba, y Mila estaba muy nerviosa... Cerraba los ojos mientras se mordía el labio, sientiendo un escalofrío solo de pensarlo.
Mientras caminaba, un hombre corpulento de largas melenas parecía que se dirigía hacia ella. Su rostro parecía un tanto perturbador. Mila miraba de reojo por si en algún momento el hombre tuviera intención de hacerle algún daño. En un despiste, Mila se encontró que el hombre estaba justo detrás de ella:
- ¿Qué hace una muchacha tan guapa sola? - el hombre corpulento le tocó el hombro, Mila inconscientemente gritó para que alguien fuese en su ayuda.
- ¡Ah! Déjame en paz - le dijo un tanto nerviosa. No quería usar su poder en el pueblo y escandalizar a todos los aldeanos. Podría provocar que la echaran del poblado y prefirió echar a correr en busca de Wind.

El elfo oscuro llegó finalmente al pueblo. Tras el incidente con el hombre en la bahía, Wind decidió comprar equipamiento para mejorar su defensa. Era muy posible que alguno de los guerreros que se presentarían en el "Gran torneo" supieran manejar mandobles semejantes al que tenía aquel hombre. Pero antes tenía que encontrar a Mila, tenía una buena razón para no separarse demasiado tiempo de su lado.
Avanzó por las calles de piedra hasta el centro del pueblo y al no ver la semidragona en la plaza, se desvió por otra calle. Vio un chico joven con la mirada temblorosa, observando nervioso a un guerrero negro que parecía intimidarle. De repente, escuchó un fuerte grito pronunciando su nombre, y Mila apareció al final de la calle perseguida por un hombre corpulento.
- ¿Pero qué diablos está pasando aquí? - pensó Wind.
La semidragona lo alcanzó y el elfo oscuro se puso delante de ella, cubriéndola con la espalda. Seguidamente, le hizo un ademán al muchacho humano para que se acercara a él. Eran dos contra uno, pero esperaba que más personas acudieran en su ayuda.

Estaba llegando a la casa que ponía en el anuncio, cuando Mørk escuchó lo que parecía ser una pelea. Por curiosidad, se desvió un poco de su rumbo y efectivamente, dos hombres considerablemente corpulentos parecían estar acosando a un joven que no parecía ser muy fuerte y a otro joven elfo oscuro espada en mano en guardia. Detrás de éste también había una semidragona.
- ¿Esa chica otra vez? Hum… Veamos qué me depara ahora el destino… - pensó ella y se dirigió donde pudieran verla - ¿Qué sucede aquí? ¿Podéis explicármelo? - dijo refiriéndose a los dos grandes hombres.
Uno de ellos se giró y al ver que se trataba de otra mujer, contestó sonriendo lascivamente:
- Acércate, acércate elfa. Voy a contártelo todo con pelos y señales - y sonrió burlonamente.
-Ya veo - dijo ella - ¿Buscabais pasar un buen rato o dinero tal vez? Pero… - cambió su expresión facial fría, por una sonrisa y mirada tremendamente diabólica - ¡Habéis encontrado a la muerte! - les gritó - ¡Huid ahora o no probaréis solo su acero, sino también el mío! - añadió mientras desenfundaba su espada.

Caminando por las calles del pueblo buscando el lugar donde le facilitarían información sobre los trabajos que quería realizar para ganar algo de dinero, Valiant se fijó en que algo ocurría en la calle que estaba a punto de pasar. Paró cerca y miró bien.
- ¿Una calle con tan poca gente? Es muy raro - pensó el elfo. Giró un poco la cabeza y vio al elfo oscuro espada en mano tapando a una muchacha como si tratase de protegerla y a un joven a su lado quieto. Enfrente de ellos habían 3 personas: un corpulento hombre, otro a su lado más bajo y delgado y una mujer elfa oscura. Valiant vio como se giraban los dos hombres y hablaban a la mujer que estaba de espaldas, pero no podía oir nada de lo que decían. De repente, la mujer desenfundó la espada.
- ¿Una pelea? Vamos a ver que tal luchan. Tal vez participen en el "Gran Torneo".

Henrik salió apresuradamente al escuchar gritos procedentes de una de las calles menos transitadas del pueblo...
- ¿Qué sucede?
Al girar la esquina descubrió la escena. Caminó hasta Nosk, se puso a su lado y apoyó de un fuerte golpe su bastón; el cual parecía estar ardiendo ligeramente un ténue y casi irreconocible fuego de un azul eléctrico. Luego miró a Nosk, y le comprendió enseguida, al ver los ojos del asustado muchacho. Su mirada fue dirigiéndose lentamente hasta el amenazador elfo oscuro, y las facciones de Henrik se volvieron más firmes.
- ¡Cualquier daño que pretendáis hacerle a este joven, os lo devolveré yo contra vos mil veces! !Sois muy valiente contra un hombre desarmado!

El corpulento hombre de largas melenas, levantó ambas manos en símbolo de paz:
- Perdonad, perdonad, yo solo quería hablar un poco con la muchacha del pelo rojizo... - miró al guerrero negro que tenía al lado y añadió - No os penséis que estoy aliado con éste, de echo, no le conozco de nada.
Y lentamente, fue retrocediendo hasta escabullirse por otra calle. Mientrastanto, un elfo arquero había llegado también a la escena. Todo el grupo miró con gesto amenazador al elfo oscuro restante, quién se encogía poco a poco pegado a la pared. Nosk dio un paso hacia delante:
- No voy a darte nada - dijo con el semblante serio - ¡Vete de aquí!
Y obedeciendo al curandero, el guerrero negro se marchó corriendo del lugar profiriendo maldiciones y lamentos.

Nosk miró a los guerreros que le habían ayudado y les dijo:
- Muchas gracias por haber acudido en mi ayuda, no se como agradecéroslo... Por mi culpa casi os metéis en un lio - luego miró a Henrik y le dijo - Lo siento, no debería haber salido solo siendo nuevo aquí y con tanta gente que hay ahora... - se paró a pensar y enseguida añadió - A lo mejor podrías enseñarme a defenderme Henrik, creo que tú tienes mucha más experiencia que yo en usar nuestro don.
El curandero se volvió a girar hacia los guerreros y les dijo con alegria:
- Si hay algo que pueda hacer por vosotros decídmelo. Por cierto, me llamo Nosk, encantado.

Mila salió de detrás de la espalda de Wind y se puso al lado de Nosk:
- Yo también tengo que daros las gracias - sonrió de forma sincera - Al igual que a él, me habéis salvado de ese malvado hombre.
De echo... me gustaría pediros un favor...
Agachó un poco la cabeza, miró a Wind un instante y levantó de nuevo la vista, mientras susurraba:
- Es posible que durante estos dos días que nos quedan por delante y más cuando lleguemos a la península del norte, nos encontremos con cosas semejantes. La próxima vez que ataquen a alguien, podrían no ser solamente dos... En mi caso, me acompaña Wind, que me protege de cualquier peligro... Pero no estoy segura de que podamos enfrentarnos a muchos guerreros a la vez - vio a Wind frunciendo el ceño - Por eso... Me gustaría que nos uniéramos aunque fuera temporalmente.
Hizo una reverencia leve y añadió:
- Mi nombre es Mila. Soy una semidragona, encantada de conoceros.

El elfo oscuro se acercó a ella y miró a cada uno de los presentes: un elfo arquero, una elfa oscura guerrera y un mago y curandero humanos. Un grupo un tanto peculiar teniendo en cuenta que Mila era una semidragona y él un elfo oscuro sombra.
Sin embargo, la idea de la muchacha no le pareció tan mal:
- Apoyo la idea - dijo finalmente - Entre todos podemos hacer un grupo y ayudarnos mutuamente hasta el día del "Gran torneo". Una vez allí, nos separaremos y competiremos para obtener el primer puesto individualmente. Y si hubiera alguien que no tenga la intención de participar... - miró al curandero amablemente - Siempre puede ser buena idea tener protección y ofrecer la ayuda que sea posible.
Agarró de la mano a Mila y se presentó como Wind.

- Interesante - murmuró Mørk, y seguidamente se presento también - Yo soy Mørk. Al parecer mi camino me ha llevado aquí por algún motivo, por lo cual tampoco objeto nada respecto a la idea.